Con su imagen de ciudad medieval refugiada entre murallas y torreones, Toledo se revela como una de las ciudades más impresionantes de España. Su casco histórico ofrece numerosos sitios que visitar y contemplar, idóneos para una escapada romántica. La Catedral, el Alcázar o la plaza de Zocodover son algunos ejemplos de los muchos monumentos y edificios históricos que cada día son visitados por cientos de personas, una oportunidad excelente para contactar con solteros que también usa Meetic.
Rincones románticos
El casco antiguo de Toledo está recostado sobre el río Tajo, que ofrece la posibilidad de recorrer algunas de las sendas que discurren de forma paralela a sus riberas. Se trata de un entorno natural con decenas de rincones románticos, aunque la ciudad cuenta con muchos más espacios repletos de magia. El barrio de la Judería dedica un monumento a El Greco, y desde él se pueden contemplar el entorno del valle y el río Tajo sobre la ciudad. También el paseo de Recaredo, que discurre a lo largo de una muralla, o el paseo de Merchán, con un parque bajo árboles centenarios y a los pies del recinto amurallado, son visitas obligadas para los amantes de la tranquilidad y las buenas vistas.
Además de la plaza de Zocodover, rodeada de cafés, restaurantes y negocios, destacan las plazas de Santa Teresa, escondida tras las murallas que dan al paseo del Recaredo, o de Santa Clara, ubicada en la antesala de los cobertizos de Santo Domingo el Real. Porque los cobertizos también constituyen uno de los grandes secretos del Toledo más romántico. Su visita por las noches, con la luz tenue y en forma de túnel, es uno de los grandes atractivos de las rutas nocturnas. Para los amantes de la luz diurna son recomendables los miradores de la ciudad. Muchos de ellos pertenecen a castillos o palacios y todos ofrecen vistas impresionantes que no dejarán indiferente a nadie, un escenario ideal para tener una cita.
Monumentos y patios
Toledo es, ante todo, una ciudad monumental. A la Catedral y el Alcázar se suman el Monasterio de San Juan de los Reyes, los puentes de San Martín y Alcántara, la Mezquita del Cristo de la Luz, la Iglesia de Santo Tomé, los hospitales de Tavera y Santa Cruz, la Puerta de Bisagra o el Taller del Moro. Siglos de historia y cultura reposan en cada esquina de esta ciudad. Para conocer gente e imbuirse en el ambiente toledano resulta imprescindible visitar las salas de exposiciones y galerías de arte que ofrece el centro, además de sus estrechas calles, plazas y rincones. La visita de los tradicionales patios de las casas toledanas, especialmente durante las fiestas de la ciudad, como la Semana Grande del Corpus, en mayo o junio, es obligada para hacer contactos con otros solteros y disfrutar del colorido y la luz de Toledo.
La ciudad dispone también de unas rutas organizadas para conocer diversos yacimientos arqueológicos, restos arquitectónicos y monumentos recuperados, muchos de ellos caídos en el olvido o que durante años no han podido ser visitados por su estado de deterioro y abandono. Es la oportunidad perfecta para conocer el patrimonio desconocido de una de las capitales más bellas del país. Todos estos edificios presentan construcciones o recursos de otras épocas o elementos de diferentes tipos que desempeñaban funciones distintas en cada uno de los momentos de la Historia en los que fueron habitados o utilizados. En definitiva, es una forma de conocer otro Toledo que va saliendo a la luz y muestra su rico legado artístico. Algunos de estos puntos de interés son la Iglesia de El Salvador, las termas romanas, la cripta de San Jerónimo, los baños islámicos de Tenerías, los baños árabes o la Casa del Judío.
Vida nocturna y ocio
Otra de las caras ocultas de Toledo es su anverso nocturno, cuando las murallas y el casco histórico ofrecen su aspecto más bohemio. La ciudad se transforma cada noche en un mapa de rincones musicales que esconde bares, pubs y discotecas que programan de jazz, rock alternativo, funky y música electrónica. Una de las mejores opciones para conocer solteros, sobre todo en verano, es visitar alguna de las múltiples terrazas que ofrece la ciudad, como en la zona de La Peraleda, en las riberas del Tajo. Allí pueden encontrarse chill outs, bares y locales de moda.