Ubicada en el Campo de Calatrava, un paraje dominado por cerros, Ciudad Real ofrece un trazado moderno que ha sabido mantener su tradicional sabor manchego. La ciudad brinda una excepcional oferta gastronómica centrada en la caza, el queso y el vino y numerosas zonas verdes gracias a los parques nacionales de Cabañeros y las Tablas de Daimiel, con los ecosistemas más ricos de la zona, perfectos para tener una cita con otros solteros de Meetic. Cuatro kilómetros de murallas y ciento treinta torreones protegían durante la Edad Media a una población integrada por cristianos, moriscos y judíos, una mezcla que sigue notándose en sus platos, su arquitectura y el carácter de sus gentes.
Historia y monumentos
La Puerta de Toledo, una de las ocho puertas que se abrían en el recinto amurallado de la ciudad, es un buen ejemplo de la arquitectura mudéjar de Ciudad Real. Sus arcos de herradura y apuntados se encuentran flanqueados por dos torreones de planta cuadrada. También la Catedral de Santa María del Prado es una muestra de la combinación de estilos, consecuencia de un largo proceso de construcción. Sus primeros elementos corresponden al siglo XIII, mientras que los últimos datan del siglo XIX. La iglesia de Santiago, la más antigua de las que se conservan, tiene origen gótico, techumbre mudéjar y bóvedas barrocas. El casco histórico de este municipio constituye una oportunidad de oro para quedar con otros solteros y pasear o tomar algo en algunas de las múltiples cafeterías y bares de la zona.
La provincia está inmortalizada en la obra de Cervantes ‘Don Quijote de La Mancha’. En la comarca del Campo de Calatrava se encuentra Almagro, bien conocida por su Corral de Comedias y su Festival Internacional de Teatro Clásico. Además de otras interesantes construcciones, merecen una visita su Museo Nacional del Teatro y su Parador de Turismo. Este antiguo convento del siglo XVI nos acercará un poco más a la historia y el arte manchegos, además de a su gastronomía.
Rincones y delicias
La cocina de Ciudad Real, de origen rural y pastoril, cuenta con quesos manchegos y berenjenas de Almagro con Denominación de Origen propia, productos que sirven de aperitivo a platos de caza como conejo al ajillo, liebre con arroz o perdiz guisada. Las gachas (elaboradas con harina), las migas (de pan y acompañadas con derivados del cerdo) o el tiznao (bacalao con pimientos, cebollas y ajos) son algunos de los platos estrellas de esta cocina, que en su repostería ofrece pestiños (masa de harina frita y azucarada) y mostillos (dulces de mosto), entre otras muchas recetas.
El Campo de Calatrava también ofrece castillos, palacios y localidades de gran importancia histórico-artística como El Viso del Marqués, Almuradiel o Calzada de Calatrava. Por su parte, la comarca de Campo de Montiel, nos descubrirá sus restos medievales de Montiel, el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera y localidades como Villanueva de los Infantes y Villamanrique, ideales para una excursión. La riqueza paisajística y natural de esta provincia queda patente en dos importantes parques nacionales, perfectos para una cita romántica: Cabañeros y las Tablas de Daimiel. Bosques mediterráneos acompañados de pastos y humedales en plena estepa manchega conforman estos espacios protegidos.
Salir de noche
La animación nocturna se traslada a la zona del torreón del Alcázar, a unos metros de la Plaza Mayor. De camino, en Hernán Pérez del Pulgar, se encuentra la sala Zahora Magestic, que programa conciertos, monólogos, magia y cabaret. Las primeras copas se suelen tomar en El Perro, un pub de música rock bastante original; en Disco Bar La Rue, ideal para conocer a otros solteros, o Cicelly. Más tarde se puede elegir entre Sion Abbey Pub, Bianco u otra de las muchas discotecas que hay en Ciudad Real y que completan una oferta variada que conjuga naturaleza, patrimonio artístico y ocio.