A veinte minutos de San Sebastián y de Biarritz y a una hora de Bilbao y Pamplona, Irún sorprende por su peculiar historia, por sus espectaculares paisajes y su amplio abanico cultural. Las posibilidades que ofrece este municipio son amplísimas: desde enfundarse en el traje de peregrino y viajar al pasado recorriendo el camino de Santiago hasta refugiarse en una de sus espectaculares y tranquilas casas rurales o explorar playas, islas, praderas, marismas y bosques. En familia o con amigos, Irún se convierte en una de las mejores opciones para conocer la popular gastronomía vasca a través de sus pintxos, pasar una tarde de compras en los más de 1.200 establecimientos de la ciudad o planear excursiones a pie o en bicicleta. Un placer para los sentidos que permitirá conocer a otros solteros que también estén en Meetic.
Rincones románticos
En Irún existen multitud de lugares interesantes que merecen ser visitados. La ermita de Santa Elena, por ejemplo, está cerca del casco viejo y fue lugar de culto durante siglos, además de contar con diversos restos arqueológicos. También la Iglesia de Juncal fue declarada Monumento Histórico Artístico Nacional y alberga una imagen gótica de la Virgen del Juncal, la más antigua que se conoce en Gipuzkoa. Para completar el conjunto de patrimonio histórico de Irún hay que mencionar el Palacio de Urdanibia, hermoso edificio renacentista. El itinerario continúa por la ermita de San Marcial, que se trata de uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Además, junto a la ermita se encuentra un mirador desde el que se divisa una hermosa panorámica de la bahía de Txingudi.
En cuanto a su entorno natural, es de mención obligada la Peña de Aia, una espectacular montaña que alberga diversos tesoros. Los amantes de la naturaleza también tienen la oportunidad de visitar el Parque Ecológico de Plaiaundi, que cuenta con una extensa variedad de animales y plantas. Otro de los grandes atractivos de Irún es la Isla de los Faisanes, uno de los enclaves más preciosos de este municipio, ideal para concertar una cita romántica.
Monumentos
La calle del Museo Oiasso, en el que se puede rastrear el pasado romano de Irún y sus alrededores, llega a la plaza del Juncal, uno de los lugares más interesantes del centro histórico, perfecto para tomar un café con amigos o conocer gente. Muy cerca de la plaza se encuentra la Casa de Beraun, un edificio blasonado levantado en el siglo XVI, aunque transformado en 1910. Volviendo hacia la avenida de Colón se encuentra la calle Eliza, donde se encuentra el Palacio Arbelaiz, una de las casas más representativas de Irún. Construido en el siglo XVII, quedó destruido con el incendio de 1936, siendo reconstruido posteriormente. Se trata de un elegante edificio de planta rectangular y tejado a cuatro aguas, con dos torres cuadradas en sus extremos y con una portada barroca entres dos columnas dóricas. En él se alojaron personajes ilustres como Enrique III de Francia, Catalina de Médicis, Carlos IV y Felipe V, entre otros.
La calle Eliza desemboca en la plaza de San Juan, en la que se alza el Ayuntamiento, de estilo barroco, que es el principal edificio civil de la ciudad. Sobresale por su pórtico de cinco arcos, su fachada de piedra de sillería y su escudo de armas. En la Sala Capitular se puede disfrutar del extraordinario cuadro de Ignacio Zuloaga ‘Mujeres de Sepúlveda’. Frente al Ayuntamiento se levanta la Columna de San Juan Harri, del siglo XVI, levantada como símbolo de la independencia de la ciudad con respecto a Hondarribia.
Ocio diurno y nocturno
En Irún conviven distintas propuestas de ocio, diurno y nocturno, desde relajarse tomando una copa en las terrazas del eje de Paseo Colón hasta relacionarse con mucha gente a cualquier hora del día en la calle Mayor. Para bailar y escuchar música, los bares y pubs de la calle Cipriano Larrañaga esperan cada noche a vecinos y visitantes.